Cómo empezar una exposición para captar la atención

Captar la atención de un público al inicio de un tema es importante pues de eso dependerá el éxito de la conferencia o presentación. Cuando hablamos, tenemos cerca de 60 segundos durante la introducción de la presentación para captar la atención del público, establecer credibilidad, orientarlos acerca de nuestro tema y motivarlos a escuchar.


1.            Estadísticas.
Busca una estadística impactante que esté relacionada con el tema del que le vas a hablar y multiplicarás el interés de tu audiencia. Recuerda que la estadística o la afirmación tienen que estar directamente relacionados con el objetivo principal de tu presentación, lo ideal es que su impacto persuada a la audiencia para que escuche y responda positivamente a tu recomendación y a los próximos pasos. Usa palabras clave al hablar de números y procura siempre citar las fuentes de dónde obtuviste la información, eso te dará mayor autoridad y llamarás más la atención del público.
 
2.            Usa una cita.
Las citas célebres no dejan de ser una variante de esas afirmaciones sorprendentes y además aquí tienes a alguien importante que las valida y eso hace que aumente la credibilidad. recuerda usar citas con significado y relevancia para el público. Una de las maneras más divertidas de comenzar una presentación es con citas de películas. Una buena cita de una película al principio de tu charla puede animar a tu audiencia. Las citas célebres funcionan mejor cuanto más formal es la ocasión. Si estás en un contexto algo más casual usar la cita célebre como apertura puede parecer algo artificial. 

3.            Cuenta una historia.
De todas las herramientas de las que dispone, la narración de historias es una de las más poderosas y exitosas. Gran parte de nuestra comunicación diaria se apoya en la narrativa de las historias y nuestro cerebro está muy acostumbrado a tratar con esa forma de comunicación. La historia puede ser sobre ti personalmente, lo que le dice al público de primera mano por qué te interesa y te apasiona el tema. O puedes contar una historia sobre otra persona de la que el público pueda aprender. Tu historia debe ser corta y estar relacionada con el tópico que estás tratando, tampoco tiene que estar llena de detalles abrumadores.
 
4.            Usa el silencio.
Si lo piensas, el silencio cumple con la premisa de lo inesperado. ¿Qué espera la gente de ti cuando sales a hablar delante de ellos? Que hables.
Si eres capaz de esperar tres o cuatro segundos sin decir nada mientras los miras, estás haciendo algo sorprendente y eso lo que hace es captar todavía más su atención. Esta técnica es muy eficiente, pero solo debes usarla si eres un presentador experimentado y tienes la capacidad de mantener la compostura para poner el silencio a trabajar a su favor. Utiliza el silencio a tu favor. Antes de iniciar una presentación, plántate frente al público y aguanta, así obtendrás sus miradas.

5.            Haz una pregunta.
Las preguntas son la mejor manera de llevar a la audiencia a donde tú quieres. ¿Qué tipos de preguntas puedes hacer? La primera son las reflexivas o retóricas, estas no necesitan una respuesta por parte de la audiencia, pero los involucran en un proceso de reflexión. Cuando están bien elaboradas y formuladas, influyen en el público para que crea en la posición del orador. El segundo tipo son las inclusivas, estas preguntas sí requieren una respuesta por parte de la audiencia y tú lo que buscas es incluirlas en tu mismo grupo.
Usar preguntas abiertas te ayuda a crear una ausencia de conocimiento que después tratarás durante tu discurso.
 
Iniciar bien una presentación es una herramienta para dar seguridad al expositor, captar la atención de los presentes y dar más profesionalidad a ese momento.
 
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