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Cómo enfrentar el miedo a renunciar

Existen diversas razones para renunciar a un trabajo, sin embargo, muchos no lo hacen o tardan demasiado a causa del miedo que sienten a renunciar. Este miedo puede ser generado por el qué dirán, por el miedo al cambio o porque no hay un plan bien definido para después. Dejar un trabajo no siempre es fácil, pero puede resultar en diversos beneficios. Si eres de los que ya no quieren estar en un trabajo por la razón que sea, pero te da miedo renunciar, te invito a seguir leyendo.


Dejar un empleo significa no solo renunciar a él sino también a tu salario, a tus amigos y compañeros, a tu rutina diaria e incluso a tu zona de confort. Por eso es lógico que sientas miedo de dar ese paso, sin embargo, recuerda que si quieres crecer tendrás que hacer algunos cambios y renunciar puede ser uno de ellos.
Antes de dar ese paso tan importante debes tener claro por qué quieres renunciar: para iniciar un emprendimiento, para tener un mejor salario o una mejor ubicación de trabajo (más cerca de casa), porque cambiarás de lugar geográfico, porque quieres dedicarte a cuidar a tus hijos, cuidar tu salud, etcétera. Cada razón que tengas es completamente válida; los cambios nos generan incertidumbre por las nuevas situaciones a las que tendremos que enfrentar, pero debemos aprender a enfrentar nuestros miedos. No pelees con ellos, déjalos estar, pero no les permitas que te corten tus planes.
 
1.  Cambiar es bueno.
Recuerda que el cambio es parte del crecimiento, si no lo haces corres el riesgo de quedarte estancado en un lugar donde no quieres estar. El miedo a cambiar de trabajo puede paralizarnos y puede hacer que nunca llegues a concretar tus nuevos planes. Esto puede generar una situación negativa si nuestro actual trabajo no nos genera bienestar, y se ha convertido en fuente de frustración y estrés.
Los cambios son parte de la vida, enfocados correctamente y con un buen plan de acción traen mejoras. Aceptar esto te ayudará a reducir la sensación de estrés y te hará sentir control para dar el siguiente paso.


2.  Sigue tus sueños.
Si ya has pensado en renunciar a un trabajo es señal de que algo no está bien, de que te estás alejando de tus sueños. Renunciar al trabajo nunca es una decisión fácil, sin embargo, hay momentos en que debemos enfrentar los miedos y seguir nuestros propósitos.
Para vencer el miedo a renunciar o para no dejar que este te paralice debes tener bien claros tus sueños y hacer que sean más grandes que tus miedos. Apóyate en aquellas personas en las que confías, apóyate en tu experiencia y en todo el conocimiento que has adquirido para hacer que esos objetivos que tienes en mente sean una realidad.
 
3.  Piensa en los beneficios.
Si el miedo de detiene y no te deja renunciar haz una lista de todos los beneficios que te esperan. Renunciar a tu trabajo podría significar mejor sueldo, mejor puesto de trabajo, alejarte quizá de un jefe o compañeros tóxicos, dedicarte a lo que realmente te gusta, cuidar tu salud. Piénsalo, si en tu trabajo actual encontraras más beneficios no estarías pensando en dejar tu trabajo. Los cambios pueden llevarnos a tener un mayor estado de felicidad y bienestar del que tenemos ahora.

 
4.  Haz un plan.
Antes de dar ese gran paso, es importante tener un plan bien elaborado. ¿Qué harás al día siguiente? ¿Irás a tu nuevo trabajo? ¿Te dedicaras a buscar trabajo? ¿Te dedicaras a tu emprendimiento? O ¿Te tomarás el día libre? Además, debes tener claras tus finanzas, para saber cuánto tiempo tienes para tener tu nueva ganancia antes de que se acabe. Márcate un calendario de tiempos, una lista de tareas a realizar y unos pasos intermedios que te ayuden a delimitar el camino a seguir. Tener todo claro y bien establecido te ayudará a enfrentar el miedo a renunciar.
 
Dar el paso para renunciar a un trabajo genera miedo, pues estas dejando algo estable y que ya conoces (aunque sea malo) por algo desconocido (aunque sea bueno), pero una vez que lo hayas enfrentado te darás cuenta que estas mejor de lo que podrías haber imaginado. Además, superar el miedo genera autoconfianza y nos ayuda a realizar los cambios de trabajo sin miedo ni ansiedad.
 
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