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Cómo desarrollar las habilidades blandas en el trabajo.

Las habilidades blandas son aquellas características que le permiten al trabajador desempeñarse bien en su trabajo y cumplir con sus objetivos. Dichas habilidades pueden ser innatas o adquiridas mediante la experiencia. Entre las habilidades blandas se encuentran la comunicación, el liderazgo, la atención al cliente, la resiliencia, el trabajo en equipo, la resolución de problemas, entre otras.


1.  Tener disposición de aprender.
Desarrollar habilidades blandas en el trabajo es importante, no importa si están son innatas o han sido adquiridas. Así como es importante mantener actualizados nuestros conocimientos también es importante actualizar las habilidades y aprender constantemente para ser mejores cada vez.
Dicho aprendizaje puede ser mediante cursos, también puede ser desde la experiencia de hacer un proyecto, de hacer preguntas, de observar a otros, de leer, etcétera. Lo importante es mantener siempre esa disposición de aprender para desarrollar alguna habilidad blanda.
 
2.  Tener claros los objetivos.
Saber qué quieres lograr te ayudará a desarrollar mejor tus habilidades pues tendrás claro cómo estas pueden ayudarte a alcanzar tus objetivos. Si bien es cierto que todas las habilidades son importantes es necesario que las priorices de acuerdo a tus necesidades laborales, por ejemplo, si trabajas directamente con clientes puedes iniciar por desarrollar la atención al cliente.
Define cuáles habilidades son importantes para ti, para ello considera cuáles te permitirán lograr tus objetivos laborales. Una vez alcanzados los objetivos y desarrolladas las habilidades podrás adquirir nuevas habilidades y desarrollarlas.

3.  Recibir retroalimentación constante.
La mejor manera de saber si estamos desarrollando bien las habilidades blandas que nuestro trabajo necesita es mediante la retroalimentación, es decir, escuchar de los expertos (compañeros con más experiencia, jefes) nuestros aciertos y errores al realizar algún trabajo que requiera el uso de la habilidad que estamos desarrollando.
Ten siempre la disposición de escuchar pues eso te permitirá mejorar profesionalmente. Pregunta a tus amigos, colegas, jefe cómo evaluarían alguna habilidad blanda en específico y cómo puedes mejorar. Pon en práctica lo aprendido. Haz también autoevaluaciones comparando tus habilidades de hoy en día con las de hace una semana.
 
4.  Practicar las habilidades.
Una frase que solemos escuchar es que la práctica hace al maestro, y en este caso no es la excepción. Si quieres desarrollar tus habilidades no basta con saber acerca de ella, o tener claros tus objetivos, tampoco basta con recibir retroalimentación una vez, es fundamental practicar constantemente hasta que la realices incluso sin pensar en ella, es decir, que ya no estés pensando cómo tratar a tu cliente, o cómo comunicarte de manera efectiva con tu equipo, sino que sea algo que hagas de manera natural.
Usa toda oportunidad que puedas para poner en práctica las habilidades que estas aprendiendo o desarrollando. En cada situación pregúntate cómo pondrías en práctica tus habilidades, pues eso también te ayudará a saber qué hacer en cada situación.
 
5.  Salir de la zona de confort.
Una de las razones por las cuales suele ser complicado desarrollar ciertas habilidades es el miedo de salir de la zona de confort. De esta manera, una persona que es tímida y que no le gusta interactuar con otras personas, debe salir de su comodidad para desarrollar la habilidad de liderar un equipo o la habilidad de dar atención correcta a los clientes.
A veces pensamos que no somos capaces de hacer algo, pero en realidad nunca lo hemos intentado por miedo a salir de nuestra zona de confort. Atrévete a cambiar, a hacer cosas diferentes y verás los resultados. 

Desarrollar las habilidades blandas requiere de paciencia, práctica y perseverancia. No es necesario que lo hagas solo, puedes hacerlo acompañado de tus amigos o de tus compañeros de trabajo. Recuerda que al final las habilidades blandas te permitirán ser un mejor profesional.


 
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