Cómo promover la gratitud en el trabajo

La gratitud en el trabajo trae consigo diversos beneficios, pero muchas veces no estamos acostumbrados a practicarla. Por ello es importante saber cómo promoverla dentro de la empresa para que cada uno de los miembros sean partícipes de dicha práctica y tener un buen clima laboral. 
 

1.  Motiva a tu equipo a reconocer el trabajo de los demás.
Generalmente el trabajo absorbe tanto a los empleados que ni tiempo se dan para reconocer lo que hacen sus compañeros. Una buena manera de promover la gratitud es motivando a cada empleado a reconocer el esfuerzo y el trabajo de los otros. Motiva a todo tu equipo a no dar por sentado los esfuerzos de las personas y, aunque sea parte de su trabajo, a comprender que dar las gracias nunca sale sobrando.
Esta práctica es más fácil en los trabajos presenciales ya que en los trabajos remotos es difícil saber qué están haciendo los demás miembros del equipo. Por ello, es fundamental establecer un sistema de comunicación para que todos puedan practicar la gratitud.
 
2.  Sé agradecido.
En otras palabras, pon el ejemplo. No puedes pedir a tu equipo una cultura de gratitud si tú no lo demuestras con tu equipo de trabajo. Tanto la presencia como la ausencia del agradecimiento en la dirección general repercuten directamente en los demás puestos de la organización. Recuerda que los empleados buscan la gratitud, en primera instancia, de sus superiores ya sea de palabra, con una llamada, un correo electrónico o un mensaje WhatsApp. Este gesto es importante porque la otra persona valorará el tiempo y la dedicación invertida en esta acción.
Cuando los líderes son agradecidos demuestran que la gratitud y el bienestar son realmente importantes para la organización.

3.  Crea oportunidades para ser agradecido.
Muchas veces las personas no saben cómo expresar su gratitud, o no encuentran el momento adecuado para hacerlo. Una buena práctica es establecer una reunión periódica que contemple el agradecimiento. Por ejemplo, durante una reunión mensual de todo el equipo, se puede empezar por destacar una tarea que cada empleado está haciendo bien. O cada empleado puede agradecer algún hecho a alguno de sus compañeros.
También se puede habilitar un espacio común para que los empleados puedan compartir de manera pública su agradecimiento.
 
4.  Crea una cultura de gratitud.
Es importante que dentro de la organización se fomente la práctica del agradecimiento hasta lograr que se vuelve algo propio de la cultura corporativa. Se puede agregar una práctica breve de gratitud a las reuniones del personal o infundir las comunicaciones internas para hacerlo. Las organizaciones deben tratar bien a sus empleados y, además, también necesitan podrán detectar todo lo bueno que puede ocurrir a su alrededor en un día cualquiera en el trabajo y tener un mejor clima laboral.
 

5.  Promueve un diario grupal de gratitud.
Reta a tus colaboradores a que al final de la jornada puedan escribir de una a tres situaciones por las cuales están agradecidos ese día. Por ejemplo, haber tenido muchas ventas ese día, resolver un problema, terminar a tiempo sus compromisos laborales, etcétera. Esta práctica puede ser en un pizarrón a la entrada o en grupo de WhatsApp o de otra plataforma, el objetivo es que todos compartan sus motivos de gratitud con todos y así todos puedan apreciarlas y disfrutarlas.

Practicar la gratitud no cuesta nada pero muchas veces nos olvidamos de ella en el trabajo. Si la fomentamos día con día empezando por nosotros mismos pronto se convertirá en un buen hábito que traerá ganancias para todos. 
 
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