El teletrabajo o el trabajo a
distancia, es en el que el empleado realiza sus labores sin la necesidad de
presentarse físicamente en el lugar de trabajo, o al menos su presencia en
dicho lugar se ve reducido a uno o dos días a la semana. Hacer trabajo a
distancia conlleva ciertas ventajas así como desventajas tanto para el
trabajador como para la empresa, por ello es necesario valorar los
requerimientos necesarios y ver si conviene a las dos partes usar alguna
modalidad de teletrabajo.
1. En el domicilio.
El teletrabajo a domicilio o home
office es el más común de los tres y con mayor potencial de crecimiento, si
bien era una modalidad usada por algunas empresas la pandemia obligó a más
empresas a unirse a dicha modalidad y tal parece que llegó para quedarse en
varias de ellas. Este tipo de teletrabajo se realiza, como su nombre lo dice,
desde la casa del empleado en un lugar previamente adaptado para ello mediante
algún dispositivo electrónico, y por lo general solo acude a la oficina uno o
dos días a la semana. Trabajar desde casa puede traer ciertas ventajas como
evitar el estrés del tráfico, ahorrar tiempos, mayor cuidado ante la pandemia,
entre otros; sin embargo, por otro lado presenta ciertas desventajas como mayor
costo de los servicios (luz, teléfono, internet) para el trabajador, no
sociabilizar con otros, no poner límites al tiempo de trabajo y por lo tanto
generar mayor estrés.
2. Móvil o itinerante.
En este tipo de teletrabajo la
actividad laboral se realiza mediante desplazamientos continuos, es decir, no
tienen un lugar fijo de trabajo pero mantienen contacto permanente con la
empresa para la cual trabajan. Por lo general quienes usan este tipo de
teletrabajo son quienes se dedican al área comercial o de ventas y que
constantemente se trasladan a donde se encuentra el cliente (casa u oficina) para
hacer la venta correspondiente. Sus herramientas principales son un teléfono
móvil, ya sea el personal o uno proporcionado por la empresa, y otro
dispositivo electrónico portátil como Tablet o computadora portátil.
También se le conoce como móvil o
itinerante porque combina el trabajo desde casa y el presencial; el empleado
tiene la flexibilidad de usar la modalidad que necesite más como cuando tiene
un hijo enfermo y prefiere trabajar desde casa.
3. En telecentro.
En este tipo de teletrabajo el
empleado realiza su trabajo desde un lugar de trabajo u oficina con recursos
tecnológicos compartidos necesarios para realizar el teletrabajo. Estos lugares
están diseñados y equipados para llevar a cabo empleos que puedan realizarse a
distancia. En este caso es la empresa quien pone a disposición el espacio para
llevar a cabo la actividad laboral en lugar de ir a la empresa o quedarse en
casa
Los centros de teletrabajo reducen el
tiempo de desplazamiento, reducen el aislamiento social provocado por el home
office, facilitan el acceso al trabajo y le brindan al trabajador las
herramientas necesarias para trabajar; no obstante implican un desplazamiento
que no siempre es necesario y puede resultar más caro para la empresa, razones
por las cuales es el menos usado.
El teletrabajo se ha convertido en una
opción viable para trabajar, ¿cuál es la mejor opción? La que se ajuste más a las
necesidades de la empresa y los trabajadores, en la cual haya que hacer ciertos
gastos y sacrificios pero sin afectar la economía ni el rendimiento o la productividad
de ambas partes.
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