Cómo ser tu propio jefe

Quizás en alguna ocasión ha pasado por tu mente poner tu propia empresa. Si es así debes tomar en cuenta que te convertirás en tu propio jefe. Por eso aquí te dejo un par de características que debes tener si deseas comenzar a ser tu propio jefe.

1. Tener flexibilidad al trabajar.
Esto significa estar preparado para los cambios, en algunos momentos todo marcharán conforme a lo planeado, pero otras no. Quizá alguien que te había brindado su apoyo económico ahora no lo puede hacer, o el lugar donde pensabas instalarte fue dado a otra persona. Debes estar listo también para enfrentar tiempos difíciles y la mayoría de las veces invertir más tiempo y dinero del que te habías propuesto. Ser flexible es importante pues te ayuda a adoptarte a las nuevas circunstancias para sacar tu negocio adelante.
 
2. Tener una buena planeación.
Debes tener en claro cuáles serán tus objetivos y tus metas a corto, mediano y largo plazo. Estos deben incluir qué quieres lograr, cuándo lo quieres lograr, donde lo quieres lograr, por qué lo quieres lograr y para qué lo quieres lograr. Tener esto claro te ayudara a conseguir tus objetivos. También debes saber de dónde obtendrás el dinero para empezar tu negocio ¿lo tienes ahorrado? ¿Pedirás prestado? Si es así, ¿a quién le pedirás el préstamo? ¿cómo lo pagaras? Con una buena planeación será más fácil llegar a dónde quieres.
 
3. Tener una buena organización.
Si eres una persona acostumbrada a ser desorganizada, será mejor ir cambiando de hábitos. Ser organizado significa respetar tu agenda, significa no saltarte tareas y realizarlas en el orden previsto. Una buena organización depende de cómo categorices tus tareas en importancia y en urgencia. Si le das más tiempo a aquello que no es importante ni urgente o descuidas lo que si es importante, tu planeación podría verse afectada.
 
4. Ser entusiasta.
El entusiasmo es el motor necesario para alcanzar el éxito. Por eso es importante sentir pasión por tu negocio, y no solo dejar de trabajar para tu jefe con quien no te llevab
as bien o porque estabas harto de horarios fijos. Ser entusiasta te da energía para lograr tus objetivos, y sobre todo para vencer los (muchos) obstáculos que se presenten en el camino sin morir en el intento. Si no acostumbras a ser entusiasta puedes pedirle a alguien que sí lo sea para que sea tu apoyo.
 
5. Tener disciplina.
Sí bien tener entusiasmo es necesario para ser tu propio jefe, ser 
disciplinado lo es aún más. Cuando seas tu propio jefe ya no tendrás a nadie mirándote feo por llegar tarde, nadie te regañará por no hacer bien tu trabajo, y eso puede ser bueno o malo. Bueno si tu sistema de control es interno, o malo si es externo, es decir dependes de otros para hacer tus obligaciones. La disciplina consiste en hacer tu trabajo, aunque ese día no tengas el entusiasmo para hacerlo y sin que nadie deba “verte feo” para hacerlo bien. La disciplina también te ayuda a ser prudente para no arruinar tu trabajo.
.


Ser tu propio jefe no es cuestión del otro mundo si realmente tienes el deseo de hacerlo y te propones hacer todo lo necesario para lograrlo. Si alguna de estas características te hace falta puedes iniciar desde ahora a trabajar en esas carencias para ser un buen jefe personal. Tú decides si eres un jefe negligente contigo mismo o si eres más exigente. De eso dependerá el éxito de tu emprendimiento. 

Tambien te puede interesar: 


Recuerda compartir y seguirnos en las redes sociales.

sígueme en Instagram siguenos en Twitter siguenos en facebook

Comentarios