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Cómo adaptarse a los cambios en el trabajo

Una de las cualidades más buscadas en las empresas es la capacidad de saber afrontar los cambios con éxito, pues eso permitirá implementar nuevas estrategias y herramientas para desarrollar nuevas oportunidades que permitan el crecimiento y desarrollo de la empresa y de sus empleados. Saber adaptarse a los cambios es necesario para tener más oportunidades de éxito.
 

1.     Mirar el cambio como una oportunidad para mejorar.
Los cambios no necesariamente tienen que representar algo malo y si pueden, en muchas ocasiones, traer consigo mayores beneficios. Hacer un cambio puede ser necesario cuando no se esta llegando a las metas o a los objetivos, por ejemplo, y sea necesario usar diferentes estrategias o hacer cambios de equipos. Pueden también haber cambios en el ambiente físico que permitan un ambiente con mejor luz o con sillas mejor acondicionadas para el trabajo. Si no hay buenos resultados, si la productividad se ha estancado o si existen otros tipos de problemas, un cambio podría ser la respuesta.
 
2.     Tener siempre disposición para aprender.
Los cambios implican muchas veces aprendizaje para saber qué hacer y cómo hacer a la hora de implementar una nueva manera de trabajar para cumplir con los objetivos laborales. Para aprender se necesita la disposición de ser flexibles y en muchos casos olvidar lo que habíamos aprendido para incorporar nuevos conocimientos, como en el caso del uso de la tecnología. El aprendizaje debe ser constante (mediante cursos, libros, preguntando a quienes saben más, etcétera) pues así será más fácil adaptarse a los cambios sobre todo si la persona se anticipa a ellos.
 
3.     Desarrollar inteligencia emocional.
Los cambios traen consigo diferentes emociones, dependiendo del cambio al que nos enfrentamos o si lo esperábamos o no. Un cambio en el trabajo puede generar alegría o puede generar miedo o enojo y si no se tiene la capacidad de gestionar dichas emociones o no se tiene una correcta inteligencia emocional los resultados pueden no ser favorables. Una correcta inteligencia emocional permite reconocer las propias emociones y regularlas correctamente a fin de poder actuar de manera adecuada ante dicha situación para no afectar a terceros ni la oportunidad que pueda traer consigo el cambio.

 
4.     Aceptar que los cambios son parte de la vida.
Una de las maneras de adaptarse más fácilmente a los cambios es comprender que lo único que se mantiene constante es el cambio y que por lo tanto la transformación de la realidad es la norma, y no la excepción, hoy en día no se trabaja igual que hace cinco o diez años, incluso los compañeros de trabajo han ido cambiando con el paso del tiempo. Si aprendemos a aceptar que los cambios son parte de la vida estaremos mejor preparados para enfrentarlos. Los cambios pueden surgir ya sea porque lo hagamos nosotros mismos para solucionar algún problema o necesidad o bien pueden hacerlo como algo externo a nosotros pero lo importante es saber adaptarse a la nueva situación sabiendo que tarde o temprano nos enfrentaremos a otro cambio.
 
5.     Enfrentar los miedos que puedan surgir ante el cambio.
Como mencionaba arriba, los cambios pueden traer consigo emociones como el miedo. Miedo por no saber lo que sucederá en un futuro, miedo por perder el control, miedo por no saber qué hacer o cómo actuar ante tal circunstancia, miedo a fallar, miedo al que dirán otros si me equivoco, miedo a abandonar la zona de confort, miedo a que las cosas no resulten como se esperaba. Para enfrentar los miedos es necesario atravesar por diferentes etapas como tener dudas; manifestar estrés, ansiedad, abatimiento; descubrir las nuevas oportunidades; comprender la nueva realidad e integrarse en el proceso del cambio. Mientras más rápido se superen estas fases, más rápido se integrará el proceso de cambio en el trabajo.


Si bien los cambios pueden generar incertidumbre verlos desde una perspectiva diferente puede ayudar a enfrentarlos de una mejor manera pues serán vistos como oportunidades de crecimiento y de aprendizaje lo cual permitirá cumplir de una mejor manera con las metas y objetivos laborales para alcanzar el éxito.
 
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